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Dicen que el ser humano es el único ser vivo capaz de tropezar dos veces con la misma piedra y al parecer esta frase de sabiduría popular se asemeja mucho a la realidad cuando nos percatamos de los resultados de participación en el último proceso electoral que tuvo lugar el domingo 27 de Mayo. En ningún caso hago referencia a los nuevos cargos públicos democráticamente elegidos, sino al elevado índice de abstención como resultado del poco interés de ejercer un derecho inherente a la condición de ciudadanos como lo es: el derecho al voto. Para esta abstención se han barajado diversas explicaciones como:
- el poco interés de los ciudadanos en la política
- la falta de confianza de la población en sus dirigentes,
hasta hemos escuchado también opiniones del tipo: la abstención se debe a que un porcentaje alto de los ciudadanos se encuentra contento con la situación actual , por lo tanto no valía la pena ir a votar. Pero más allá de cualquier tipo de análisis lo cierto es que ha habido una abstención generalizada que ha afectado a toda la sociedad, incluido nuestro colectivo, el de l@s nuev@s ciudadan@s, ya que de 110 mil inmigrantes no comunitarios que poseemos la nacionalidad española en Cataluña, al parecer nuestra participación no llegaría al 20%(Cifras no oficiales). No olvidemos que de estos 110 mil un poco más de 70 mil somos latinoamericanos y no habríamos llegado a ejercer nuestro derecho al voto más de 18 mil en total. Lo cual es una lastima ya que era una oportunidad importante para demostrar nuestro interés en como se gestiona la sociedad en la que vivimos y quienes queremos que realicen esta gestión.
Luego se difunde la noticia que se esta programando una manifestación en Barcelona de los inmigrantes para protestar por la decisión de la FIFA que prohíbe jugar partidos de fútbol a más de 2500mt de altura, que no esta mal, pero me parece que tenemos la tendencia a canalizar de una forma un tanto extraña nuestra vitalidad y capacidad reivindicativa. Parece ser que una actividad deportiva como el fútbol continúa siendo para nosotros más importante que la correcta gestión de nuestra sociedad, sí nuestra sociedad, por si todavía existía alguna duda, Cataluña es hoy por hoy nuestra sociedad. Es la ciudad dónde vivimos con nuestras familias y dónde se desarrollará el futuro nuestro y de nuestros hijos.
En este último proceso electoral hemos asistido a una progresión de los partidos de derecha y de extrema derecha. Hemos sido testigos de cómo en Badalona el Partido Popular luego de basar toda su campaña en un vídeo, dónde no hace otra cosa que manipular y mentir sobre algunos aspectos de la inmigración, acusando a nuestro colectivo de todos los males de la sociedad, se ha visto recompensado con dos regidores más y se ha colocado como la segunda fuerza política en esa ciudad.
En Barcelona tanto el Partido Popular como Convergencia i Unión han instrumentalizado el tema de la inmigración, promoviendo una sociedad en dónde los inmigrantes sólo sean fuerza de trabajo y prou.
Y para terminar la PXC, Plataforma por Cataluña, un partido de extrema derecha que promueve ideas tan “progresistas” como la de construir escuelas especiales para los hijos de los inmigrantes, por que estos no merecen asistir a las mismas escuelas con los hijos de los autóctonos. Un partido que tiene como líder aun Falangista y Franquista y que ha visto aumentado sus regidores en Cataluña de 4 que obtuvo en el año 2003 a 17 regidores que ha obtenido en estos últimos comicios.
Pero al parecer todo esto no es suficiente para que los inmigrantes(nuevos ciudadanos) asumamos la responsabilidad que implica el hecho de ser ciudadanos, que implica el hecho de participar y dar nuestro voto por el modelo de sociedad en el cuál deseamos vivir y que vivan nuestras familias.
Sólo espero que llegue el momento en el cuál dejaremos de tropezar en la misma piedra. Desde aquí deseo felicitar a todos los que fueron y ejercieron su derecho a opinar, ya que una sociedad deriva de la voluntad de las personas.
Cataluña será una sociedad plural é intercultural o simplemente no será. |
